En la tarde de este jueves, ante el Juez Segundo Penal con funciones de control de garantías, John Jairo Coneo Guerrero, apodado ‘El boxeador’, aceptó haber asesinado a Héctor Carlos Boneu Cabrera en la mañana del Jueves Santo, durante la audiencia de formulación de imputación de cargos y medida de aseguramiento.

‘El boxeador’ se había entregado en la mañana del pasado martes al Coordinador de la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía. Le fueron imputados los delitos de homicidio agravado y porte ilegal de arma de fuego, a los cuales se allanó completamente y le fue decretada medida intramural en la cárcel Modelo.

Coneo preacordó con la Fiscalía 11 de la URI una pena de 206 meses de prisión, unos 17 meses. Durante la audiencia, el imputado pidió perdón a los familiares de Boneu aunque con eso no les devolverá a su ser querido. ‘El boxeador’ escudó su actuación en que estaba borracho y no midió sus acciones.

Junto a Coneo están vinculados a la investigación, por el asesinato, dos agentes de policía, adscritos a la Metropolitana de Barranquilla: el patrullero Luis Alberto Pérez Del Río y el subintendente Deivis Valencia Contreras, a quienes se les dictó medida de aseguramiento y fueron enviados a la cárcel de Sabanalarga para funcionarios públicos.

El hecho ocurrió en la carrera 7G con calle 48, a las 6:20 de la mañana del pasado 13 de abril. Los tres imputados iban a bordo de un vehículo de servicio público cuando el taxista tuvo que frenar en seco para no atropellar a Héctor Carlos Boneu Cabrera, que salía de su casa, a quien apodaban ‘El orejón’.

Los tres hombres discutieron con el peatón y lo amenazaron con una pistola. Cuando el taxista había arrancado, le pidieron que se regresara y Coneo Gurrero descendió del vehículo, le puso el arma en el cuello a Boneu y lo amenazó con pegarle un tiro, lo que efectivamente hizo.

‘El boxeador’ se volvió a subir al taxi y se dieron a la huida. En el transcurso de la mañana del Jueves Santo, el taxista buscó a una abogada amiga y le contó todo lo sucedido. La jurista le aconsejó que fuera a la Fiscalía y relatara los hechos.

Además del testimonio, un video de seguridad sería la otra prueba contundente.

En él se ubica a los tres hombres en un bar en el barrio El Rosario, en la carrera 45 entre calles 44 y Murillo.

En el lugar habían estado tomando toda la noche del miércoles 12 de abril. En video quedó registrado cuando el patrullero Pérez Del Río recibe la pistola y le introduce el cargador. Luego se ve cuando sale a la calle exhibiendo el arma y se montan en el taxi.